EL PUEBLO Y LAS RUINAS DE PISAQ
EN EL VALLE SAGRADO DE LOS INCAS
Tour de día entero
La visita del colorido mercado artesanal de Pisaq con las majestuosas ruinas que están en las cercanías del pueblo es el objetivo principal de nuestro tour. Saliendo del Cusco haremos dos paradas que nos permitirán de conocer dos conjuntos arqueológicos de menor importancia pero de elevado interés arquitectónico y cultural: la fortaleza de Puka Pukara y el centro ceremonial de Tambomachay.
Llegaremos al Valle Sagrado de los Incas para entrar en el pueblo colonial de Pisaq donde se encuentra el famoso mercado artesanal. Después de haber almorzado en un restaurante tomaremos la ruta que nos conduce a las ruinas de Pisaq, un área arqueológica de primera importancia que nos regalará repetidamente lindas vistas sobre el Valle Sagrado.
Puka Pukara -
su nombre significa “fortaleza roja” debido a la coloración de la piedra utilizada en su construcción. Tenía la función de vigilar el Camino Inca Real al Antisuyo, el sector oriental del Imperio de los Incas. También es posible que haya funcionado como un punto de observación, además de ser un centro administrativo y militar.
Tambomachay –
En el tiempo de los Incas Tambomachay fue un importante centro religioso para la adoración del agua. Ubicado a solos 7 km de la ciudad del Cusco y a una altitud de 3.700 metros sobre el nivel del mar, Tambomachay está formada por paredes y canales de agua, que culminan en una pendiente de la cual fluye agua cristalina. El sitio es también conocido como los baños de los Incas.
Pisaq -
El pueblo de Pisaq es conocido por su colorida feria dominical. Debido a su gran popularidad este mercado se ha ampliado a todos los días de la semana, siendo el día más importante el mercado de los domingos. Es el mejor lugar para comprar y negociar, hay variedad de souvenirs, artesanías, cerámica, textileria y otros.
Las ruinas de Pisaq se encuentran en la parte alta de la misma montaña donde se ubica el pueblo de Pisaq. Se cree que servían como un observatorio astronómico y como un centro militar. Las ruinas están rodeadas de terrazas y plataformas; estas magníficas terrazas fueron cultivadas por los Inkas como modo de incrementar la productividad agrícola y usar las laderas en estas alturas. Pisaq se encuentra a una altura de 2,790 m.s.n.m.
